Surge nueva red de periodistas de Ciencia

El periodismo científico es un subgénero del periodismo propiamente dicho, consta de dos ramas: la difusión y la divulgación de la ciencia.
El periodismo divulgativo requiere de un lenguaje accesible, ameno y atractivo al lector, estimulando a su vez la curiosidad y el interés por el conocimiento científico. Entre las características de un buen periodista divulgador están: tener conocimientos de redacción y estilo literario, una cultura general que le permita poseer un amplio criterio al tratar los temas relacionados con la ciencia y la tecnología, por lo que debe estar muy consciente de los efectos que éstas puedan tener en la sociedad, así como contar con una formación teórica relacionada con la filosofía del conocimiento científico.
Por otro lado, la difusión científica se realiza cuando un investigador publica un texto de información científica a manera de reporte o informe, dirigido a sus pares, con términos técnicos, precisos, verificables y sustentados con investigación.
Precisamente, para esclarecer los conceptos arriba mencionados y fomentar la profesionalización, además de definir las fronteras de este subgénero periodístico, es por lo que se formó la Red Mexicana de Periodistas de Ciencia (Red MPC).
El pasado 13 de enero, un grupo de 29 periodistas firmó un acta constitutiva de la asociación civil llamada Red MPC, la cual busca fomentar la comunicación entre la sociedad civil y la comunidad científica, promover oportunidades de beca para cursos y diplomados, capacitar y crear un espacio de discusión racional pública y permanente sobre ciencia y periodismo, así como mejores condiciones económicas y laborales.
Una de las labores más importante de la asociación es elevar la calidad del periodismo de ciencia en México, desmarcando el periodismo científico del periodismo tradicional ortodoxo, deportes y de la farándula, ya que no pueden ser tratados como iguales y solicitar por ejemplo cuatro notas diarias, como usualmente se hace en los cuerpos de redacción de los medios tradicionales, cuando la cantidad es lo menos importante en los temas de la ciencia. Aquí lo que importa es la calidad de la nota y la veracidad de la información.
Javier Cruz Mena, divulgador de ciencia y académico en la Universidad Nacional Autónoma de México, fue entrevistado por la Agencia Informativa Conacyt en relación a la fundación de esta Red. En dicha entrevista, Cruz Mena mencionó que él y otros colegas advirtieron que, en los encuentros internacionales, los periodistas de ciencia mexicanos no tenían voto en las decisiones, debido a que no se contaba con una representación federativa local de periodistas de ciencia, como la de Brasil, Argentina, Unión Europea y Asia, para votar en la Federación Mundial de Periodistas de Ciencia (WFSJ, por sus siglas en inglés).
Debido a la formación de la Red MPC, ahora México puede votar para tomar decisiones y concientizar a los medios de que las notas de ciencias deben ser tratadas diferente.
Un claro ejemplo de lo que puede generar la comunicación por parte de los medios se dio cuando, en 1998, la revista The Lancet publicó un estudio del Dr. Andrew Wakefield, en el cual vinculaba la vacuna triple vírica sarampión, rubeola y paperas con el autismo en niños. Este estudio tuvo repercusiones y creó un ambiente contrario a las vacunas en muchos países, llevando la proporción de vacunados de un 92 a un 83%. En 2010, la revista se vio obligada a retirar dicho estudio científico después de que el Colegio General Médico británico descubriese un supuesto engaño, en el que las conclusiones eran falsas y los métodos utilizados también.
Debido a esto, es importante que las publicaciones de ciencia sean minuciosamente cuidadas, y ser concientes de la repercusión que pueden llegar a tener.
Lic. Montserrat García Talavera
http://cienciauanl.uanl.mx/?p=1797
