Chikungunya, una epidemia sin fronteras
La fiebre Chikungunya apareció recientemente en el territorio mexicano, en noviembre de 2014, en el estado de Chiapas. Causada por un alfavirus, se transmite por la picadura de dos especies de mosquitos: Aedes aegypti y Aedes albopictus, que transmiten también el dengue en México. Son comunes en las zonas costeras y bajas del país, y se reconocen por su color negro con rayas blancas.
Esta fiebre tuvo su origen en 1952 en Tanzania, país de África occidental. En esta región, los habitantes la llamaban “Chikungunya”, que significa “aquel que se encorva”, en referencia a la postura que adoptan las personas infectadas, debido a los intensos dolores articulares. Los mosquitos hembra pican a las personas para alimentarse de sangre, por lo que el virus aprovecha esta interacción mosquitos-personas para propagarse. El tiempo de incubación del virus en el hospedante es variable, de uno a doce días. Después de este tiempo, la persona se vuelve contagiosa para los mosquitos sanos, que se infectan cuando la pican. Tras un periodo de incubación del virus de 10 días en su cuerpo, el mosquito se convierte en transmisor de la enfermedad para las personas sanas, y así se va repitiendo el ciclo del virus.
Los síntomas de la fiebre Chikungunya se presentan del primero al duodécimo día de la picadura, a lo que se denomina periodo de incubación del virus. Uno de los síntomas más fuerte es la fiebre mayor a 39ºC, acompañada de intensos dolores articulares en dedos, manos y muñecas, también se pueden presentar en tobillos, rodillas y cadera. Las molestias son muy debilitantes, además que pueden aparecer erupciones cutáneas, que producen comezón, en piernas, brazos, tórax y abdomen. Otros síntomas que se presentan son dolores de cabeza, náuseas, vómito y dolores musculares. Generalmente, las molestias duran de 3 a 10 días.
Desafortunadamente, en estos momentos no existe vacuna alguna para esta enfermedad. El tratamiento solamente ayuda a disminuir los síntomas del paciente, y se basa en reposo, control de fiebre con medicamentos del tipo de paracetamol, antiinflamatorios para los dolores articulares, geles humectantes para la comezón, soluciones hidratantes y rehabilitación en pocos casos.
El Departamento de Salud de El Colegio de la Frontera Sur (ECOSUR) ya realiza investigaciones sobre la fiebre Chikungunya y sus vectores. Para ellos es primordial contar con un sistema de vigilancia que permita alertar oportunamente, tanto a instituciones de salud como a la población, de brotes futuros. En este sentido, sus investigadores trabajan en el diseño de índices de riesgo que incluyen datos epidemiológicos, entomológicos, climatológicos y de movilidad social para apoyar las acciones de control.
(Jessica Y. Martínez Flores)
Fuente: http://www.conacytprensa.mx