Buscan detección temprana de cáncer gástrico

Luis E. Gómez

Fuente: El Universal

CIENCIA UANL / AÑO 17, No. 65, ENERO – FEBRERO 2014

Foto: El Universal

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La Universidad Nacional Autónoma de México informó que un grupo de especialistas de esta casa de estudios analiza en pacientes mexicanos la progresión del cáncer gástrico, en busca de biomarcadores que permitan establecer un método de detección temprana de esta neoplasia.

En un comunicado, Gonzalo Castillo Rojas, quien participa en este proyecto multidisciplinario, señaló que en México no se practica la endoscopía en sujetos jóvenes, lo que complica la detección temprana de esa afección silente, cuya sintomatología es inespecífica.

El investigador de la Facultad de Medicina comentó que en algunos casos se presentan síntomas de dispepsia y datos clínicos de alarma, como anemia y vómito persistente, pérdida de peso y masa abdominal palpable.

Apuntó que eventualmente, en un pequeño porcentaje de pacientes, puede presentarse dispepsia (dolor gástrico, agruras, quemazón, sensación de saciedad), pero son señales inespecíficas, pues 30% de la población general las presenta, y sólo en 1 o 2% se ha encontrado cáncer gástrico, tras una evaluación endoscópica.

Ante este problema de salud pública, dijo que él y sus colaboradores buscan desarrollar, con base en biomarcadores, un método más sensible y no invasivo como la endoscopía (se introduce un tubo hacia el estómago para visualizar el órgano y tomar biopsias para estudios histopatológicos) para detectarlo en etapas tempranas.

Subrayó que con los biomarcadores o marcadores biológicos (cambios medibles a nivel molecular, bioquímico o celular, que permiten localizar la presencia de la exposición al microorganismo, así como determinar las consecuencias biológicas de esta exposición) se podría detectar a los sujetos en riesgo de desarrollar cáncer. De esta manera, se les daría un pro- nóstico adecuado y seguimiento médico oportuno.

Cabe señalar que la mortalidad en el mundo por ese padecimiento es de 75% de los enfermos, y que en 2000, de 900 mil fallecieron más de la mitad. Mientras en México se observa una tendencia similar, con una mortalidad cercana a 77%, estadísticas de la Secretaría de Salud registraron, en 2008, 5 mil 509 decesos, y ese mismo año reportaron 5.2 casos ocurridos por cada 100 mil habitantes. (Luis E. Gómez) (Fuente: El Universal)