Editorial Ciencia Año 19 Número 81

 

PATRICIA ZAMBRANO ROBLEDO* JAIME ARTURO CASTILLO ELIZONDO* ROGELIO JUVENAL SEPÚLVEDA GUERRERO*

CIENCIA UANL / AÑO 19, No. 81, SEPTIEMBRE-OCTUBRE 2016

En la actualidad es inconcebible plantearnos la vida sin el uso de sistemas de comunicación celular, Internet o televisión digital. A pesar de ello, sólo una minoría de la población mundial tiene conocimiento de que estos servicios se proveen desde fuera de la atmósfera terrestre por medio de satélites que se encuentran orbitando en el espacio.

Hasta ahora es muy poco lo que se conoce de los avances científicos y tecnológicos en materia del espacio que se han realizado o que se están llevando a cabo en las principales universidades de nuestro país. Sabemos que la historia aeronáutica y espacial mexicana data de 1910, cuando el presidente Porfirio Díaz compró el primer avión para México con motivo de conmemorar el centenario de la Independencia. Cuatro años después, en 1914, se llevó a cabo la primera batalla aeronaval del mundo en el puerto de Topolobampo, Sinaloa.

Durante esta época se diseñaron aeronaves, hélices y motores en los pocos talleres aeronáuticos que se habían establecido en México.

En 1956, en la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASL), comenzaron a diseñar los primeros cohetes, lanzados desde la plataforma de lanzamiento en Cabo Tuna. Es importante señalar que en 1961, la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL) lanzó un cohete diseñado por profesores de la Facultad de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (FIME) en conjunto con la Escuela Industrial “Álvaro Obregón”. Podría decirse que éstas fueron de las últimas actividades que se hicieron en nuestro país, debido a que por muchos años la investigación y el desarrollo espacial se redujeron de manera muy considerable. Sin embargo, algunas universidades y centros de investigación, como la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el Centro de Investigación Científica y de Educación Superior de Ensenada (CICESE) pudieron mantener sus programas para el desarrollo de satélites.

Podría considerarse que la actividad espacial se reanuda de manera nacional en la segunda década del siglo XXI. En 2010 se creó la Agencia Espacial Mexicana (AEM), que trajo consigo nuevos programas y proyectos innovadores. Asimismo, en 2011 se formalizó la Red Temática Nacional de Ciencia y Tecnología del Espacio (Redcyte), a la que pertenecen dos profesores de la UANL.

En 2014 México ingresó al Consorcio Internacional para la Ingeniería del Espacio (UNISEC, por sus siglas en inglés), que engloba todas las universidades del mundo que realizan investigación y desarrollo en materia del espacio. Cabe señalar que la representante general del Capítulo UNISEC-México es la Dra. Bárbara Bermúdez Reyes, profesora investigadora de la FIME, y a su vez, el Dr. Ángel Colín, profesor investigador de la Facultad de Ciencias Físico Matemáticas (FCFM), es el representante de este capítulo en Nuevo León.

Hoy en día, en México se están desarrollando proyectos científicos y tecnológicos en el sector aeroespacial, como sistemas satelitales, nuevos materiales, percepción remota, telemedicina, medicina espacial, entre otras. En la UANL se están diseñando estructuras para cubo-satélites y recubrimientos protectivos para sistemas satelitales. Además, se tiene un proyecto financiado por la Agencia Espacial Mexicana (AEM) para construir un cubo-satélite de dos unidades para validar sistemas e instrumentación astronómica. De manera adicional, en la UANL se han llevado a cabo dos programas de entrenamiento nacional en la construcción de picosatélites educativos (cansat).

Es por esto que este número especial está dedicado al tema aeroespacial, y en la sección de investigación se incluyen los trabajos que se realizaron para participar en el 2° Concurso Nacional de Picosatélites Educativos CANSAT. Nuestra universidad será sede y recibirá a equipos de Tamaulipas, Puebla, Sonora, Baja California, entre otros, el 7 de octubre del año en curso.

En conclusión, podemos decir que en la UANL estamos formando recursos humanos multidisciplinarios para el sector aeroespacial, algo que sin duda contribuirá en gran medida al desarrollo del país.

 

*Universidad Autónoma de Nuevo León.

Contacto: patricia.zambranor@uanl.edu.mx