Plan ceibal e inclusión social: una computadora por niño

Alicia Kachinovsky*

CIENCIA UANL / AÑO 16, No. 64, OCTUBRE-DICIEMBRE 2013

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Antes de leer este artículo, el lector debe saber que Uruguay es un país con bajo crecimiento demográfico y saldo migratorio negativo. Según el Instituto Nacional de Estadística,(1) tiene poco más de tres millones de habitantes: 3.286.314, y se concentran en su capital, Montevideo, 1.319.108 personas.

En la primera mitad del siglo XX, Uruguay había logrado mantener índices de pobreza relativamente bajos, comparados con los de la región. No obstante, un país con temprana universalización de cobertura de los derechos sociales básicos, vio su proyecto malogrado por causa de las sucesivas crisis económicas de la segunda mitad del siglo. Se sumaron luego los efectos de los bajos niveles de inversión que destinó a educación y otras políticas sociales en las últimas décadas del pasado siglo. Todo ello condujo a un deterioro del capital humano.

Por el contrario, ya en la primera década del siglo XXI, empieza a prevalecer un enfoque político diferente de la situación del país, con la intención de asumir el costo de las políticas más prescindentes en materia social, y a procurar acciones responsables para revertir revertir tales circunstancias.

El Plan Ceibal (Proyecto de Conectividad Educativa de Informática Básica para el Aprendizaje en Línea) constituye un ejemplo paradigmático de inversión social, a cuenta de la institución educativa. Se trata de una política pública que el gobierno uruguayo comenzó a implementar en 2007: una aventura humana iniciada en una pequeña localidad de poco más de 1.000 habitantes, Villa Cardal, extendida luego al resto del interior del país y, más tarde, a la capital.

En menos de tres años, el plan convierte a Uruguay en la primera experiencia mundial de cobertura total, al dotar a todos los niños y maestros de escuelas públicas de una computadora personal (conocida como Ceibalita o XO) y una red que los une. En una segunda etapa, la apuesta crece y abarca también a la enseñanza media.

En tanto política pública, el Plan Ceibal se rige por un postulado: una computadora por niño. La idea original fue presentada por Nicholas Negroponte, director del Laboratorio de Medios del Instituto Tecnológico de Massachussets (MIT), en el Foro Mundial de Davos, en 2005. Se trataba entonces de la creación de una organización sin fines de lucro, con sede en EE.UU. OLPC (One Laptop Per Child). A través de la creación de dispositivos de bajo costo, se procuraba garantizar el acceso y utilización universal de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC).

Como era de esperarse, el proyecto ha conquistado importantes mayorías, pero no unanimidades. No faltan quienes lo vean como una iniciativa cargada de buenas intenciones, pero manifiestan sus reparos, dentro y fuera de fronteras. Entre estos últimos se encuentran el mexicano Edgar Gómez Cruz (2) y el español Fernando Garrido, (3) quienes pronuncian una severa crítica al ingenuo determinismo tecnológico. Plantean como alternativa el concepto de domesticación tecnológica; ponen de relieve la importancia de la decisión y la acción humana para incidir en los cambios tecnológicos, y no quedar expuestos al impacto supuestamente inevitable de las tecnologías salvajes.

En lo que respecta a Uruguay, si bien el objetivo inmediato consiste en adoptar aquel postulado para abatir la brecha digital, ello se ha pensado como vía regia para minimizar en el mediano plazo la brecha social. Sin embargo, el fuerte afán democratizador de este emprendimiento requiere cuestionarse desde un primer momento, del mismo modo que sus resultados.

Fotografía - Secretaría de Comunicación - Presidencia de la República

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El desafío uruguayo rebosa de expectativas esperanzadas, pero no peca de ingenuidad. Se entiende que la computadora por sí sola no aporta necesariamente a la mejora de la calidad de vida, si no viene acompañada por otras instancias de intercambio y formación. Las consecuencias imponderables de este  proyecto sobre la educación, sobre la vida de los niños uruguayos y su entorno social, han sido y seguirán siendo objeto de estudios.

La relevancia del tema convocó los más caros principios universitarios. La Comisión Sectorial de Investigación Científica (CSIC) de la Universidad de la República (UdelaR) convocó en 2008 a un primer concurso de “Proyectos de investigación orientados a la inclusión social” a ser financiados. Un relevamiento previo, para detectar qué problemas nacionales concitaban una mayor demanda de investigación, ubicó al Plan Ceibal entre los que obtuvieron mayor prioridad.

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Los cuatro proyectos ganadores se desarrollaron entre 2009 y 2012; pero recién en el primer semestre de 2013, el Laboratorio Tecnológico del Uruguay (LATU), organismo encargado de la implementación y monitoreo del Plan Ceibal, difunde los objetivos, supuestos y resultados de tres de los cuatro proyectos financiados a través de una publicación: “Plan Ceibal e inclusión social: perspectivas interdisciplinarias”.(4)

Primeros investigaciones “Plan Ceibal e inclusión social: perspectivas interdisciplinarias”

De los tres proyectos publicados, el primero de ellos consiste en un estudio de tipo cuantitativo efectuado por cuatro economistas de la UdelaR, que tuvo como propósito la evaluación del impacto del Plan Ceibal en el desempeño escolar a nivel público y en la motivación de estos niños, a partir de la entrega de la computadora: “Una primera evaluación de los efectos de Plan Ceibal con base en datos de panel”.

Para ello se comparan dos evaluaciones de aprendizajes. La primera de ellas, que se toma como línea de base, comprende los resultados obtenidos por el Segundo Estudio Regional Comparativo y Explicativo (SERCE), aplicado en 2006 a niños de tercer año de primaria de todo el país (antes de la implementación de Ceibal). La segunda evaluación corresponde a 2009; sólo se aplica a aquellos escolares que en 2006  estaban en tercer año, y que en 2009 cursaban sexto grado en su mayoría. Incluye escuelas de los siete departamentos del país con mayor exposición al Plan Ceibal (grupo tratamiento) y escuelas de Montevideo y Canelones (grupo control). Al momento de practicarse esta segunda evaluación, el plan no había llegado todavía a estos dos departamentos últimos.

Si bien la estimación del impacto se basa particularmente en pruebas de matemáticas y de lectura, la investigación sólo pone de relieve el efecto positivo y significativo del plan en el área de las matemáticas (0,2 desvíos con respecto a la media).

El análisis de variables que inciden en el aprendizaje de los niños se realizó a través de cuestionarios aplicados a niños, familias y docentes. Entre los resulefectos del plan sobre los hogares y la comunidad. Adopta para ello una metodología cuanti-cualitativa.

Se preguntan en qué medida el Plan Ceibal reduce la brecha digital y otras brechas sociales que supongan procesos de inclusión social. Las autoras conciben dicha brecha en términos de “desigualdades existentes para la apropiación de las TIC con fines de desarrollo”. Toman en cuenta acceso y conectividad, así como usos y procesos de incorporación a hogares y comunidad.

Un apartado especial de este estudio corresponde al uso de las ceibalitas por parte de las personas más pobres de la población. Los números permiten conjeturar, en este caso, que en el decil más pobre es muy probable que la computadora que tiene el hogar sea la  tados obtenidos se destaca la valoración positiva de la escuela en una amplia mayoría de los niños, levemente superior en aquéllos ya beneficiados por el plan. Sin embargo, estos números no permiten afirmar que haya una motivación particular hacia el ámbito escolar a cuenta del plan. Lo mismo ocurre con respecto al clima escolar, no se detectaron diferencias significativas entre los niños expuestos y los no expuestos al Plan Ceibal. Esto no concuerda con la percepción de padres y educadores que, en su mayoría, observan un mayor interés de los niños por asistir a la escuela y cumplir con las tareas asignadas desde que tienen su XO.

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Sociología y economía son las disciplinas representadas por las autoras de la investigación que se reseñará a continuación: “Contribución de Plan Ceibal a la reducción de la brecha digital y a la inclusión social”.(6) A diferencia
de la anterior, ésta se propone dar a conocer los XO. El Plan Ceibal habría logrado, pues, un impacto probable en cuanto a la reducción de la brecha digital. Se señala, asimismo, la necesidad de profundizar en los diversos usos que le dan niños, jóvenes y adultos de esos hogares a la nueva herramienta, para sostener que se trata de un verdadero cierre de la brecha.

En sus conclusiones, este estudio afirma que se ha verificado el cierre de la brecha en cuanto a la disponibilidad de computadoras en el hogar, siendo menores los cambios en términos de conectividad. Por otra parte, son pocos los adultos que usan computadora en los hogares a los que ha llegado el plan.

Lo anterior obliga a mirar este proceso en perspectiva: los niños y jóvenes que sí usan las TIC en los hogares Ceibal tendrán mañana mayores oportunidades que sus referentes adultos para insertarse en el mercado laboral.

El análisis cualitativo de la información ha permitido conocer los usos que se le dan a la laptop y la valoración positiva que hacen del plan los entrevistados. El acceso a información y conocimiento actualizado constituye uno de los pronunciamientos adultos a través de los cuales es posible inferir el impacto del plan a nivel educativo. En este sentido, los más beneficiados son los hogares que estaban más excluidos del acceso a estos servicios.

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Otros impactos generados por Ceibal remiten a los cambios ocurridos en el paisaje comunitario: la ocupación de espacios públicos que gozan de conectividad por parte de los niños (buscan señal, escuchan música, juegan… y tiñen dichos espacios con los colores luminosos de sus ceibalitas).

Las autoras no ocultan las opiniones de un grupo minoritario que prefiere los métodos tradicionales de enseñanza e incluso fundamenta los efectos negativos del plan.

Como corolario, se sostiene que la profundización de estos resultados a favor de la inclusión social requiere avances en la apropiación social de esta tecnología: propiciar acciones de carácter integral y transversal con otras políticas públicas y potenciar el trabajo local con la ciudadanía.

La última investigación que se tomará en consideración responde a un enfoque cualitativo e involucra a un mayor número de disciplinas que las anteriores (psicoanálisis, psicología, lingüística, fonoaudiología, didáctica): “Impacto de Plan Ceibal en el funcionamiento cognitivo y lingüístico de los niños”.(7) Para explorar dichos efectos, se proponen pensar la ceibalita como un tercer objeto de mediación, al considerar a la familia y a la escuela –en particular a la madre y a la maestra– como primero y segundo mediador entre el niño y la cultura, respectivamente.

Las autoras pretenden comparar el impacto del plan sobre el desarrollo cognitivo y lingüístico en contextos sociales diversos, valorar el uso y aprovechamiento de las potencialidades de la XO y estimar los efectos concomitantes en la subjetividad de los aprendices.

El trabajo de campo se lleva a cabo en cuatro escuelas públicas uruguayas, dos de Montevideo y dos de una pequeña localidad del interior del país, ubicadas en distintas zonas y contextos socioculturales (dos de contexto crítico y dos pertenecientes a un contexto social medio).

Al tomar como punto de partida que el tratamiento igualitario de la desigualdad puede profundizar aún más las desigualdades, se cuestiona el alcance del postulado “una computadora por niño”, sin exclusiones. Si bien éste ayudaría a la construcción de una educación equitativa, es probable que no produzca el mismo efecto en niños que presentan limitaciones en el desarrollo de sus habilidades básicas, de carácter irreversible, que con frecuencia acompañan a la devaluación sociocultural.

En cuanto a los resultados, este estudio muestra que el desarrollo cognitivo y lingüístico previo constituye una suerte de requisito que determina las importantes diferencias observadas por las investigadoras con respecto al uso y aprovechamiento que los niños realizan de la computadora, especialmente en lo que se relaciona con el acceso a la información, a su aplicación y procesamiento: “…el uso de la XO en la educación favorece el desarrollo cognitivo y lingüístico de los niños, al tiempo que el desarrollo cognitivo y lingüístico previo condiciona la optimización de los efectos del Plan Ceibal”.(7)

Comprueban, asimismo, en la población estudiada, que el plan aporta al objetivo de una mayor equidad en educación, aunque con fuerte dependencia de la acción pedagógica y del apoyo recibido a través de otras políticas sociales, económicas y culturales.

Para dar cuenta de las vivencias infantiles más auténticas sobre la inclusión de la XO en la escuela y en sus vidas, se utilizan diversas herramientas de exploración indirecta, adaptadas al presente estudio, capaces de trascender el pensamiento consciente, y permiten acceder a representaciones preconscientes. Así es posible contrastar algunas preocupaciones del mundo adulto –padres y maestros–, con la perspectiva infantil. Se percibe entonces que el desplazamiento del docente o de cualquier otro vínculo por la tecnología o el empleo de la misma con exclusivos fines lúdicos (en detrimento de los objetivos escolares) son apenas parte de temores infundados, propios de la resistencia
a los cambios.

Si bien las mayores frecuencias del uso asignado se organizan en torno a la categoría ‘juego y entretenimiento’, situación presumible por tratarse de niños, la ceibalita es vivenciada en segundo término como un soporte importante en el trabajo escolar. Incluso para algunos niños, la presencia de la máquina marca un antes y un después desde el punto de vista pedagógico.

Se detecta, asimismo, un mayor aprovechamiento de la XO en las dos escuelas del interior estudiadas que en las de la capital: mayor familiaridad con la laptop concordante con un surtido de actividades bastante más amplio que en las escuelas de la capital.

Resta por mencionar el clima ceibal, el sentimiento de bienestar que manifiestan estos niños. El Plan Ceibal constituye para ellos un acontecimiento vital. Los efectos de tal acontecimiento en la vida de estos hombres del mañana es una interrogante que esta investigación deja planteada, sin responder.

Reflexiones finales

Los tres proyectos de investigación presentados tienen el mérito de recoger datos sobre los primeros tiempos del Ceibal, tiempos fundacionales de una apuesta política en materia tecnológica que llegó para quedarse en el Uruguay.

Los integrantes y responsables de estos tres proyectos también saben de sus debilidades: los límites y provisoriedad de sus resultados, de sus preguntas y de sus propias estrategias de indagación. Luego de tres años de trabajo en escuelas, hoy resulta más claro que es imposible prever el impacto que producirá la tecnología cuando los adultos de las próximas generaciones, y en especial los maestros, hayan sido niños del Plan Ceibal y todos los escolares uruguayos sean nativos digitales, independientemente del origen social.

Quizás el mayor logro obtenido se relacione con las nuevas preguntas generadas, amén del espíritu de colaboración e intercambio sostenido entre el Plan Ceibal y la Universidad de la República. Recuérdese en tal sentido que el propio LATU financia y toma a su cargo la difusión de los resultados de proyectos impulsados y financiados por la UdelaR.

En estos pocos años se han recogido testimonios disímiles, algunos a modo de antítesis de los otros, y estudios que arrojan resultados divergentes. Bienvenidas sean las diferencias, que muestran los matices de una realidad siempre compleja y multifacética, que denuncian los límites del entendimiento humano y de supuestas verdades objetivas. ¡Lo que más importa es que haya condiciones para que se genere ese caudal narrativo y espacios de debate!

En otro lugar se ha hablado de esto como de las narrativas del Ceibal. (8) En consonancia con posiciones de carácter hermenéutico, se ha defendido el valor de dichas narrativas, en tanto constituyen poderosas herramientas de regulación social y en cuanto modelan las realidades sociales. Con ello se hace referencia a un impacto escasamente discutido y difícil de estimar: el valor simbólico de un discurso inclusivo y democratizador sobre el conjunto de la ciudadanía y, en particular, sobre estos niños que han de ser los uruguayos del mañana.

El Plan Ceibal se inscribe en un clima-país de cambios que debe tenerse en cuenta. Esta circunstancia promueve la hipótesis de una sociedad que, “en su afán de forjar un nuevo proyecto de país, también debía construir un nuevo mito educativo”.(9) El mito tiene un halo novedoso, cae fuera de lo canónico e incita a hablar de ello. De este modo, la agenda del debate público coloca a la educación y a la infancia uruguaya en uno de sus primeros planos, y por si fuera poco…le otorga un lugar a la esperanza.

* Universidad de la República, Uruguay.
Contacto: alicia.kachinovsky@gmail.com

Referencias

1. Instituto Nacional de Estadística (2012). Uruguay en cifras 2012. Recuperado de: www.ine.gub.uy/biblioteca/uruguayencifras2012/capítulos/Población.pdf.

2. Gómez Cruz, E. (2009). Domesticación de la tecnología: una aproximación crítica al proyecto OLPC. En: Balaguer, R. (ed.) Plan Ceibal: los ojos del mundo en el primer modelo OLPC a escala nacional, pp. 45-53. Montevideo: Pearson Education.

3. Garrido, F. (2009). ¿Otra vez el mismo error? OLPC, determinismo tecnológico y educación. En: Balaguer, R. (ed.) Plan Ceibal: los ojos del mundo en el primer modelo OLPC a escala nacional, pp. 33-44. Montevideo: Pearson Education.

4. Rivoir, Ana (Coord.) (2013). Plan Ceibal e inclusión social: perspectivas interdisciplinarias. Montevideo: Plan Ceibal-Universidad de la República.

5. Ferrando, Mery, Machado, Alina, Perazzo, Ivone, Vernengo, Adriana (2013). Una primera evaluación de los efectos de Plan Ceibal en base a datos de panel. En: Rivoir, Ana (Coord.). Plan Ceibal e inclusión social: perspectivas interdisciplinarias. 15-47. Montevideo: Plan Ceibal-Universidad de la República.

6. Pittaluga, Lucía y Rivoir, Ana (2013). Contribución de Plan Ceibal a la reducción de la brecha digital y a la inclusión social. En: Rivoir, A. (Coord.). Plan Ceibal e inclusión social: perspectivas interdisciplinarias. 49-97. Montevideo: Plan Ceibal-Universidad de la República.

7. Kachinovsky, Alicia, Martínez, Susana, Gabbiani, Beatriz, Gutiérrez, Rosario, Rodríguez Rava, Beatriz, Ulriksen, Maren, Achard, Paula (2013). Impacto de Plan Ceibal en el funcionamiento cognitivo y lingüístico de los niños. En: Rivoir, A. (Coord.). Plan Ceibal e inclusión social: perspectivas interdisciplinarias. 99-152. Montevideo: Plan Ceibal- Universidad de la República.

8. Kachinovsky, A. (2009). Proyecto Flor de Ceibo: la Universidad de la República en tiempos del Plan Ceibal. En: Balaguer, R. (ed.) Plan Ceibal: los ojos del mundo en el primer modelo OLPC a escala nacional, pp. 95-109. Montevideo: Pearson Education.

9. Kachinovsky, A. (2009). Proyecto Flor de Ceibo: informe de lo actuado (agosto-diciembre, 2008). Recuperado de http://www.f lordeceibo.edu.uy/f iles/Informe%20Flor%20de%20Ceibo%202008.pdf