Caninos podrían salvar especies en peligro de extinción

Los perros, considerados como los mejores amigos del hombre, son también reconocidos por poseer un sentido del olfato muy desarrollado. Dicha cualidad es muy bien aprovechada por el hombre, al entrenar a los canes con el propósito de encontrar a personas extraviadas, detectar drogas, e incluso detectar enfermedades como el cáncer.

Hoy en día, el trabajo de estos “grandes amigos” ha tomado mayor relevancia al darles la tarea de identificar olores de animales en peligro de extinción y sus excrementos, de esta forma los canes ayudarán con los esfuerzos de conservación.

Aunque parece una tarea simple, para el ser humano es complicada, ya que las muestras fecales tan pequeñas no son percibidas tan fácilmente por el ojo humano, además de que pueden ser confundidas con otros excrementos. Seguir la materia fecal puede develar algunos datos importantes como “dónde viven las especies en peligro de extinción, cuántos de ellos viven en un área y lo que podría estar amenazándolos”.

Working Dogs for Conservation es la organización que se dedica a entrenar a los caninos de conservación experimentados, que incluyen una hembra de pastor alemán y dos collies fronterizos machos. De esta manera, los científicos podrán rastrear las especies que se puedan estar reduciendo.

Actualmente, el objetivo es monitorear al lagarto leopardo de nariz roma en el Valle de San Joaquín. Una vez que dicho excremento estuviera en manos de los investigadores, éstos podrían recuperar las muestras y determinar el género, la genética de la población, dieta, hormonas, parásitos, uso de hábitat y salud de los lagartos.

Estudiar este tipo de especies y el entorno en donde se desarrollan puede ayudar a los científicos a comprender si los esfuerzos de conservación existentes están ayudando.

 

Fuente: elnuevodia.com; invdes.com