Estimulación acústica en sincronía

Para la mayoría de la gente, la audición es el segundo sentido más importante. El valor de la comunicación oral lo hace aún más importante que la visión, en algunos aspectos; por ejemplo, un invidente puede integrarse a una conversación con mucha mayor facilidad que una persona sorda. Los estímulos acústicos nos proporcionan información acerca de aquello que no está a la vista, logrando así que los oídos trabajen igual tanto en la luz como en la oscuridad.

De acuerdo con el doctor Markus Franziskus Mueller, del Centro de Investigación en Ciencias de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (CIS-UAEM), los ritmos musicales mejoran significativamente la coordinación interpersonal, ayudando a la coordinación de los movimientos, esto debido a la fuerte conexión que existe entre la corteza auditiva y motora. Un ejemplo de esto podría ser cuando estamos sentados y concentrados en algo mientras escuchamos un fondo musical, quizá sin darnos cuenta estamos moviendo el pie. El ritmo acústico actúa como un marcapaso que empuja la parte motora.

Con esta teoría, el CIC-UAEM, en colaboración con el Departamento de Música y Musicología, de la Universidad de Hildesheim, y el Instituto de Ciencias del Deporte de la Universidad de Hannover de Alemania, diseñaron un experimento que consistió en medir los estímulos acústicos rítmicos en jugadores de futbol.

En dicho experimento participaron hombres y mujeres de diferentes ligas de futbol alemanas, realizando una rutina de ejercicio como parte de sus sesiones de entrenamiento. Asimismo, se formaron diversos equipos, los cuales estuvieron bajo la influencia de un ambiente acústico, en sincronía, a 140 pulsaciones por minuto, así como en condiciones no-síncrono (no coordinados en tiempo).

Los resultados arrojaron resultados muy interesantes, en el modo síncrono se obtuvieron resultados positivos, significantes en la estadística de goles. Bajo la influencia del ambiente acústico los equipos lograron marcar 30 por ciento más goles en comparación con aquellos que no fueron sometidos a un estímulo. Lo más interesante fue que el resultado varió mucho entre hombres y mujeres, es decir, los equipos varoniles mejoraron significativamente al jugar bajo la influencia de un ambiente acústico, mientras que en las mujeres pasa todo lo contrario, ya que muestran un peor desempeño de juego. Aparentemente, las chicas mejoran su desempeño con un tiempo diferente, el cual se sigue investigando para complementar la estadística.

De acuerdo con el investigador, en general, al escuchar música se modifica la frecuencia de movimiento, por lo que si todo el equipo escuchase el mismo ritmo, en sincronía, quizá las frecuencias de sus movimientos sean similares, creando una mayor sinergia y coordinación.

Esta investigación ofrece una nueva esperanza de mejora en los resultados a equipos que no pasan por una buena racha. Los cuales, con una buena estrategia de entrenamiento, podrían cambiar sus estadísticas. Lo mejor es que se puede aplicar a infinidad de deportes o áreas de trabajo que requieran sincronía, obteniendo resultados extraordinarios.

Jessica Martínez F.

 

Referencias:

Estímulos acústicos podrían mejorar el rendimiento de un equipo de futbol (21 de marzo de 2017). Consultado el 05 de abril de 2017, de http://conacytprensa.mx/index.php/ciencia/salud/13755-estimulos-acusticos-podrian-mejorar-rendimiento-equipo-futbol

 

Audición, los sentidos corporales y los sentidos químicos. Consultado el 05 de abril de 2017, de https://books.google.com.mx/books?id=wHzuBykqn8cC&pg=PA177&lpg=PA177&dq=est%C3%ADmulos+ac%C3%BAsticos&source=bl&ots=pxuROV4StB&sig=Hs4R45U83XzsN42SIUb7nrOL2io&hl=es-419&sa=X&ved=0ahUKEwjN1o_y9OrSAhUOzmMKHc5OCfkQ6AEIYzAO#v=onepage&q=est%C3%ADmulos%20ac%C3%BAsticos&f=false