Buscan secuenciar genoma de nematodo que afecta al ajo

ajogenoma

UNAM/DICYT

CIENCIA UANL / AÑO 18, No. 71, ENERO-FEBRERO 2015

Además de las plagas, bacterias, hongos y virus que afectan a los cultivos en general, también debe prestarse atención a los nematodos fitoparásitos, conocidos como gusanos redondos, capaces de ocasionar pérdidas agrícolas millonarias. Su principal medio de control es el uso extensivo de nematicidas; sin embargo, estos compuestos no sólo son caros, sino altamente tóxicos y peligrosos para el ambiente, indicó Alejandra Rougon Cardoso, investigadora de la Escuela Nacional de Estudios Superiores (ENES), Unidad León, quien dirige un proyecto de investigación enfocado en estudios genómicos y funcionales, en un nematodo fitopatógeno de importancia agrícola.

El proyecto, financiado por el Conacyt, está encaminado a descifrar la secuencia del genoma de un nematodo del género Ditylenchus, del que existe poca información, por lo que la doctora y su grupo pretenden generarla y, sobre todo, conocer más con respecto al proceso de infección, a fin de encontrar posibles genes blancos para su control en el ajo. En colaboración con una institución de investigación polaca, que cuenta con cepas europeas que los especialistas de la ENES pretenden secuenciar al tiempo de hacerlo con cepas mexicanas, harán comparaciones y buscarán predecir los genes que se encuentran en su genoma, para determinar la función de aquéllos que actúan en el proceso de patogénesis.

El nematodo propuesto tiene muchos hospederos y uno de los principales es el ajo durante sus diferentes etapas. “Incluso desde el momento en que se siembra, el diente ya puede estar infectado por este organismo o permanecer en el suelo y material vegetal por mucho tiempo –hasta 10 años– en una especie de dormancia y desecación, hasta encontrar un medio propicio para crecer de nuevo”, explicó Rougon.

Este parásito representa un riesgo latente en el país, en particular en Baja California, Sonora, Chihuahua, Sinaloa, Zacatecas, Nuevo León, Chiapas, Campeche, Quintana Roo y Guanajuato, donde hay grandes extensiones agrícolas de posibles hospederos del nematodo, tanto de ajo como de cebolla, avena, papa, maíz y alfalfa, “cuya producción sobrepasa los 119 millones de pesos al año”.

Si este organismo llegara a establecerse en esas zonas, podría devastar áreas de plantíos, sobre todo de ajo, hortaliza que se siembra en 25 estados del país. Tan sólo en 2013, en México, se produjeron más de 59 mil toneladas. (UNAM/DICYT)